Trastornos por estrés

Anteriormente, los trastornos relacionados con traumas y factores de estrés eran considerados trastornos de ansiedad. Sin embargo, ahora se considera distinto porque muchos pacientes no sufren ansiedad pero sí tienen síntomas de anhedonia o disforia, ira, agresividad o disociación.

TRASTORNO DE ADAPTACIÓN (ESTRÉS)

psicólogo, psicologo, psicóloga, psicologa, psicologo online, psicólogo online, psicologo especialista, psicólogo especialista, crecimiento personal, ser feliz, depresión, depresion, ansiedad, tristeza, estrés, estres, obesidad, anorexia, bulimia, miedo, ataque de ansiedad, sintomas de depresión, depresion sintomas, síntomas de ansiedad, depresión síntomas, estresado, estresada, trastorno de ansiedad, sintomas depresión, ansiedad síntomas, obesos, depresiva, obesidad imc, toc, terror, psicólogos, ira, autoestima, crecimiento personal, bienestar emocional, paz mental, trastornos psicológicos, trastornos psicologicos, problemas psicológicos, problemas psicológicos, adelgazar, comer emocional, atracones, atracon, atracón, comer compulsivamente, tca, adelgazar, engordar, obsesión, obsesion, pensamientos intrusivos, violencia, agresión, adolescentes, suicidio, cansancio, rendimiento, productividad, disciplina,

¿El estrés se ha apoderado de tu vida, dejándote agotado/a y constantemente irritable?  


Cada día parece una batalla constante, una lucha para mantener el equilibrio en medio del caos.

En nuestro mundo acelerado y exigente, es fácil caer en las garras del estrés y sus efectos negativos en nuestro bienestar físico y emocional. 


Entendemos lo agotador que puede ser lidiar con el estrés diario. La presión en el trabajo, las demandas familiares y las responsabilidades cotidianas pueden acumularse, dejándote en un estado constante de tensión. Recuerda que eres humano/a, y el estrés es una respuesta natural a las exigencias de la vida


El cansancio se convierte en tu compañero de viaje y la irritabilidad se apodera de tu ser. El estrés crónico puede agotarnos y dejarnos sintiéndonos atrapados/as en un ciclo interminable de tensión y preocupación.

Permítenos guiarte hacia un camino de bienestar y equilibrio. Juntos/as, exploraremos las causas subyacentes de tu estrés y te proporcionaré herramientas y técnicas probadas para gestionar eficazmente las tensiones de la vida diaria.

Aprenderás a identificar tus desencadenantes de estrés y a implementar estrategias prácticas para reducir su impacto en tu vida. 

Trabajaremos en el desarrollo de habilidades de afrontamiento saludables. Te enseñaremos a establecer límites y a priorizar tu bienestar, para que puedas manejar el estrés de manera efectiva y proteger tu salud mental y física. 


La irritabilidad constante puede ser un síntoma claro de la carga emocional que estás soportando y puede afectar tus relaciones y tu bienestar general. Trabajaremos en mejorar tu comunicación y tus habilidades de resolución de conflictos, para que puedas establecer relaciones más saludables y construir un entorno de apoyo que te ayude a superar el estrés. Además, te enseñaremos técnicas de manejo del tiempo y la organización que te permitirán abordar tus responsabilidades de manera más efectiva y reducir la sensación de estar abrumado/a.


Recuerda, eres más que tu estrés. Eres capaz de encontrar el equilibrio y la paz mental que necesitas. 


No permitas que el estrés te robe la alegría de vivir. Tú mereces una vida plena, llena de satisfacción y felicidad. Permítenos ayudarte a liberarte de las cadenas del estrés y a abrazar un estilo de vida más tranquilo y saludable. 


No esperes más, CONTÁCTANOS. 

  • Qué es el trastorno de adaptación (estrés)

    Los trastornos de adaptación producen una marcada angustia y el deterioro de los síntomas emocionales y/o conductuales causados por un factor de estrés identificable. Las personas a menudo se entristecen, se enojan o se deprimen cuando suceden eventos desagradables. Dichas reacciones no se consideran un trastorno a menos que la reacción sea más intensa que lo que se suele esperar en la cultura de la persona, o cuando la capacidad de la persona para funcionar se ve significativamente afectada.


    Los factores estresantes pueden ser un evento único y aislado (p. ej., perder un trabajo), múltiples eventos (p. ej., contratiempos financieros y románticos), o problemas continuos (p. ej., cuidar a un miembro de la familia con una discapacidad significativa). Los factores estresantes no tienen que ser eventos traumáticos abrumadores como en el trastorno por estrés postraumático (TEPT). 

    La muerte de un ser querido puede precipitar un trastorno de adaptación. 


    Los síntomas de un trastorno de adaptación generalmente comienzan poco después del evento estresante y no continúan más allá de 6 meses después de que el estrés se ha detenido. El trastorno de adaptación produce numerosas manifestaciones, dentro de las cuales las más frecuentes incluyen: estado de ánimo deprimido, ansiedad y mala conducta. También hay mayor riesgo de intento de suicidio.


    Los pacientes deben tener: síntomas emocionales o conductuales dentro de los 3 meses siguientes a la exposición a un factor estresante, angustia marcada que está fuera de proporción con el factor estresante (teniendo en cuenta factores culturales y de otro tipo) y/o los síntomas afectan de manera significativa el funcionamiento social u ocupacional.


    El trastorno por estrés postraumático (TEPT) y el trastorno por estrés agudo forman parte del diagnóstico diferencial pero tienen diferentes marcos temporales y descriptores más específicos de los factores estresantes y la respuesta del paciente. Los pacientes que tienen una discapacidad o angustia significativa después de un evento traumático, pero que no cumplen con los criterios para el TEPT o trastorno por estrés agudo pueden tener un trastorno de adaptación.


    Los trastornos de adaptación son perturbadores y pueden asociarse con tasas elevadas de suicidio. Merecen una evaluación completa y un plan de tratamiento sólido. 

TRASTORNO POR ESTRÉS AGUDO

¿Te has sentido abrumado/a por un evento traumático reciente?

¿Has experimentado una intensa angustia emocional y dificultades para funcionar después de haber vivido una situación estresante?


Podrías estar experimentando lo que se conoce como trastorno por estrés agudo, una respuesta normal a eventos anormales. No es una señal de debilidad o falta de valentía, sino una reacción natural del organismo a un evento traumático abrumador. Sin embargo, si no se trata adecuadamente, puede convertirse en un trastorno de estrés postraumático (TEPT), que es más duradero y puede tener un impacto aún mayor en la calidad de vida de una persona.


El trastorno por estrés agudo es una reacción temporal a un evento traumático, como un accidente automovilístico, un desastre natural o una experiencia de violencia. Es normal que las personas se sientan angustiadas y perturbadas después de vivir un suceso tan impactante. Sin embargo, en algunos casos, los síntomas pueden persistir durante un período prolongado y dificultar el funcionamiento diario.


Es posible que experimentes una sensación de desapego emocional o una desconexión de la realidad, lo cual puede dificultar la concentración y el enfoque en las tareas cotidianas. Además, es común experimentar una ansiedad y un miedo intensos, lo que puede llevar a evitar situaciones o lugares relacionados con el evento traumático.


También puede manifestarse a través de síntomas físicos, como dolores de cabeza, problemas para dormir, dificultades para respirar o palpitaciones. Estos síntomas pueden ser una respuesta directa del cuerpo al estrés extremo y la tensión emocional asociados con el trauma.


Es importante buscar ayuda profesional si crees que estás experimentando trastorno por estrés agudo. Nosotros podemos brindarte el apoyo necesario para superar esta etapa difícil. Con el tiempo y el apoyo adecuados, es posible superar el trastorno por estrés agudo y recuperar el bienestar emocional.


Si crees que tú o alguien que conoces está experimentando trastorno por estrés agudo, CONTÁCTANOS.

La atención temprana y el apoyo adecuado son fundamentales para facilitar la recuperación y el retorno a una vida plena y saludable.

  • Trastorno por estrés agudo

    Las personas han atravesado un evento traumático, experimentado directamente (p. ej., una lesión grave o amenaza de muerte) o indirectamente (p. ej., ser testigo de acontecimientos que les suceden a otros, enterarse de hechos que les ocurrieron a familiares o amigos cercanos). Tienen recuerdos recurrentes del trauma, evitan los estímulos que les recuerdan el trauma y aumentan su estado de alerta. 


    Los síntomas comenzarán en las 4 semanas siguientes al episodio traumático y durarán un mínimo de 3 días pero, a diferencia del trastorno por estrés postraumático, no duran más de 1 mes. Las personas que experimentan este trastorno pueden presentar síntomas disociativos (Pérdida de memoria (amnesia) de ciertos períodos, hechos, personas e información personal. Una sensación de estar separado de ti mismo y de tus emociones. Una percepción de que las personas y lo que te rodea están distorsionados o son irreales. Un sentido confuso de la identidad). 

    Además, manifiestan 9 o más de estos síntomas los experimentas durante un período de entre 3 días y 1 mes: 

    • Recuerdos angustiantes, recurrentes (involuntarios e intrusivos del evento), 

    • Sueños angustiantes recurrentes sobre el evento

    • Reacciones disociativas (p. ej., flashbacks) en las que los pacientes sienten como si el evento traumático se estuviese repitiendo

    • Intensa angustia psicológica o fisiológica cuando recuerda el episodio (p. ej., por ingresar a un sitio similar, por sonidos similares a los que escuchó durante el evento)

    • Incapacidad persistente de sentir emociones positivas (p. ej., felicidad, satisfacción, sentimientos amorosos)

    • Un sentido de la realidad distorsionado (p. ej., sentirse confundido, el tiempo enlentecido, percepciones distorsionadas)

    • Incapacidad de recordar una parte importante del evento traumático

    • Esfuerzos para evitar recuerdos angustiantes, pensamientos o sentimientos asociados con el evento

    • Esfuerzos para evitar factores externos que rememoran el suceso (personas, lugares, conversaciones, actividades, objetos, situaciones)

    • Trastorno del sueño

    • Irritabilidad o crisis de enojo

    • Hipervigilancia

    • Dificultades para concentrarse

    • Respuesta de sobresalto exagerada


    Las manifestaciones deben provocar malestar intenso o deteriorar significativamente el funcionamiento social u ocupacional, y no deben ser atribuibles a los efectos fisiológicos de una sustancia o de otro trastorno médico.


TRASTORNO POR ESTRÉS POSTRAUMÁTICO (TEPT)

¿Has experimentado un evento traumático que sigue afectando tu vida diaria?


El trastorno por estrés postraumático, o TEPT, es una afección que puede surgir después de vivir o presenciar un suceso impactante como un accidente grave, violencia, abuso, desastres naturales o incluso situaciones de guerra.

Los síntomas pueden variar, pero es común experimentar flashbacks vívidos y aterradores del evento traumático, pesadillas perturbadoras, evitación de situaciones que recuerden el trauma y una constante sensación de angustia y ansiedad. Estos síntomas pueden interferir significativamente en la vida cotidiana y las relaciones personales.


Nosotros te apoyaremos y ayudaremos a comprender y procesar el trauma de una manera segura y efectiva y te proporcionaremos las herramientas necesarias para lidiar con los síntomas, reducir la ansiedad y reconstruir tu vida.

Recuerda que el camino hacia la recuperación puede ser desafiante, pero no estás solo en esta lucha. Da el primer paso hacia la recuperación y CONTÁCTANOS hoy mismo.


Recuerda, el TEPT no define quién eres. Tienes el poder de superarlo y construir una vida plena y saludable.

¡No te rindas!

  • Trastorno por estrés postraumático (TEPT)

    El trastorno por estrés postraumático (TEPT) es un recuerdo recurrente y molesto de un episodio traumático insoportable; los recuerdos duran más de 1 mes y comienzan dentro de los 6 meses del suceso. Los síntomas también incluyen la evitación de los estímulos asociados al episodio traumático, pesadillas y episodios de recuerdo disociativo. 


    Cuando suceden cosas terribles, muchas personas se ven afectadas por mucho tiempo; en algunos casos, los efectos son tan persistentes e intensos que son debilitantes y constituyen un trastorno. 


    En general, los sucesos que podrían provocar un trastorno por estrés postraumático son los que invocan sentimientos de miedo, impotencia u horror. Estos eventos pueden ser experimentados de manera directa (p. ej., sufrir una lesión grave o una amenaza de muerte) o indirecta (p. ej., presenciar cómo otras personas sufren lesiones graves, se mueren o sufren amenazas de muerte; enterarse de hechos que le sucedieron a familiares o amigos cercanos). El combate, la agresión sexual y los desastres naturales o generados por el hombre son causas frecuentes de trastorno por estrés postraumático.


    Los síntomas se pueden subdividir en categorías: intrusiones, evitación, alteraciones negativas en la cognición y el estado de ánimo, y alteraciones en la activación y la reactividad. Lo más habitual es que los pacientes tengan recuerdos frecuentes e indeseados en los que se reproduce el episodio desencadenante. Las pesadillas relacionadas con el episodio también son comunes.


    Menos comunes son los estados disociativos en vigilia, en los cuales los episodios vuelven a vivirse como si estuvieran sucediendo (episodios de recuerdo disociativo), que a veces hacen que el paciente reaccione como si se encontrara en la situación original (p. ej., ruidos fuertes, como los fuegos artificiales, podrían desencadenar un episodio de recuerdo disociativo de encontrarse en combate, lo que podría hacer que una persona buscara refugio o se echara cuerpo a tierra en busca de protección).


    Los pacientes evitan los estímulos asociados al trauma y se sienten emocionalmente fríos y pierden el interés por las actividades cotidianas.

    A veces los síntomas representan una continuación del trastorno por estrés agudo, o pueden producirse por separado, con un inicio de hasta 6 meses después del trauma. A veces, la manifestación plena de los síntomas se posterga, y aparecen muchos meses o incluso años después del episodio traumático.


    La depresión, otros trastornos de ansiedad y el abuso de sustancias son frecuentes en las personas que tienen trastorno por estrés postraumático crónico.


    Además de la ansiedad específica provocada por el trauma, los pacientes pueden sentir culpa por sus acciones durante el evento o porque han sobrevivido cuando otros no lo han hecho.


    También, las manifestaciones deben provocar malestar intenso o deteriorar significativamente el funcionamiento social u ocupacional, y no deben ser atribuibles a los efectos fisiológicos de una sustancia o de otro trastorno médico.

Share by: